Tropezones del
pensamiento
Justificaciones de tesis: Experiencia
Descubrí,
al hacer el trabajo, cosas que superan por mucho al resultado escrito
de lo que se ha reflexionado. Durante este largo proceso de escribir
una tesis he llegado a observar cómo trabajo. Me he reconocido
organizándome para realizar actividades, veo algunos patrones y
“procederes” que se conjugan creando una verdadera maravilla. No
es que yo sea una maravilla, es más bien que lo que he observado me
ha maravillado: me ha maravillado la gran cantidad de cosas que son
el producto de experiencias pasadas, la forma en que hago claves para
que al transcribir haya una primera redacción que relacione lo que
escribo con lo que integro, cómo esto es producto de más de un año
trabajando en el mismo proyecto, y además el resultado de todos los
años de carrera en la que hice trabajos.
Detrás de esa manifestación de una
conducta (lo cual es maravilloso) hay muchos factores que
intervienen: poner música, transcribir hasta la madrugada, usar
plumas de colores (terminarse las plumas), lectura y relectura, utilización de mucho papel
(que si no fuera reutilizado me carcomería aún más la conciencia),
diccionario de sinónimos, etc.
He revisado cómo me han surgido
problemas de investigación a los que nunca antes me había
enfrentado del modo en que ahora tuve que resolver: agregar
información de un texto anterior con un sentido particular a un
nuevo texto con otro sentido pero que tenía que rescatar gran parte
del primer trabajo, variar la reflexión para corregir los grandes
trampas de la abstracción en las que había caído, sin la certeza
de no estar cayendo nuevamente.
La preocupación de que el trabajo
de tesis no sólo fuera un documento que al terminar se quedara en un
mero trámite administrativo, sino una reflexión lo suficientemente
cuidada para que fuera más cercano a las personas que conozco
(quizás también a desconocidos) que pueden estar interesadas en el
tema y que escribirlo de modo complicado dificultaría esta idea que
me parece nos puede ayudar a nuestra labor como educadores y
educandos. Posibilitó que lograra rescatar un pequeño borrador de
un cierto tipo de dinámica que podría implementar en caso de dar un
curso en el que haya posibilidad y necesidad de redactar documentos
para inspeccionar cualquier información; para lograr desarrollar
habilidades que en mi caso hubieran sido de gran ayuda y que al mismo
tiempo permita observar la organización que se tiene para conseguir
desarrollar el trabajo y la exploración de herramientas, a modo de
volverlas evidentes para usarlas en la organización que a cada uno
le funcione, creando y modificando lo que se vaya descubriendo.
El
trabajo de tesis sobrepasa las diversas ideas que tenemos al
respecto, y observar esto es una de las maravillas de hacer la tesis.
Independientemente de lo que suceda en una perspectiva a futuro, lo
que en realidad sucede es la creación constante de experiencia.
La experiencia de la tesis.
Sociologización educativa
Revolución
Fantástica