lunes, 19 de diciembre de 2011

Cartón entre papeles

Cartón entre papeles


Me desborda,
como el mar a la playa
como el sueño a la madrugada
como la voz al sonido
como el pétalo a la hormiga.

Me desborda,
como los puntos al caparazón
como el instante en que la tierra
se vuelve viento
cuando las alas se extienden
y se da al vuelo.

Como lo
s ángeles al cielo,
cayendo al inframundo,
revoltosos.
Como ese ángel bizarro, callado,
que no deja de contemplar
ese vuelo sencillo que resuelve
todas las corrientes.

Me desborda como siempre,
totalmente diferente.

Revolución Fantástica
Desliz sincero

martes, 13 de diciembre de 2011

Traducir II

Traducir II

La canción ya antes mencionada "I gotta feeling" del grupo The Black Eyes Peas que se encuentra en su álbum "The E.N.D." sigue sonando a pesar de todos los que la han olvidado, cada vez que aparece en las ondas que reciben los oídos de ciertos escuchas seleccionados se continúa una respuesta que dice, a condición de la pronunciación y el conocimiento de la letra de la canción, exactamente lo mismo que la canción...

Es menester entonces mencionar las capacidades que nuevamente tiene el lenguaje, ya que la traducción siempre conlleva una interpretación.

El "I gotta feeling that tonight's gonna be a good night" se traduce como "yo tengo el presentimiento de que esta noche será una buena noche".

Sin embargo la condición de la interpretación en la traducción conduce a plantear una utilización de las palabras que conformen el mismo sentido.

La canción se puede traducir como otra canción que refiere el mismo sentido, Tenez-Vous bien de Salvatore Adamo, traducida a su vez al español y cantada por Raphael con el nombre de "Mi gran noche".

"I gotta feeling that tonight's gonna be a good night" podría traducirse entonces como "hoy para mí es un día especial, hoy saldré por la noche... ¿qué pasará, qué misterio habrá? Puede ser mi gran noche."

Ese "Pour une fois je m'étais décidé à semer mes principes / Pour una fois je m'étais écrié ce soir je m'émancipe" goza de seguir entonándose gracias a las múltiples traducciones y posibilidades del sentido que la actualización del lenguaje goza.

Revolución Fantástica

(para un fantástico acoplamiento mírese http://www.youtube.com/watch?v=tSqELV1-ok4)

martes, 8 de noviembre de 2011

Des-tiempo

Des-tiempo

A Sabina, por tan joven y tan viejo

Cuando el futuro es pasado,
ni el presente te echa la mano.

Explotaron mis proyectos,
cayendo entre mis uñas.
Despacio como un suspiro lleno de humo
y deprisa como mezcal y cerveza.

Ante las trivialidades,
ante los eruditos
ante mi vaivén y el tuyo
el día a día y el suyo

El tren del futuro
se salió de la vía, se quedó varado
antes del asalto,
se fragmentó y desvaneció en seguida
se convirtió en pedazos.

Piezas que se juntaron,
y se dividieron,
manchas que se borran,
manchas que se pegan.
miradas que obligan a cerrar los ojos.
Silencios que obligan al silencio.
Y palabras que se escabullen de los reflejos.

Los proyectos se quedan en la frontera
porque la geopolítica se diluye.
el centro es el foso,
y el caballo una muchacha que hace bizco.

Retretes atascados,
Bellotas carcomidas,
y un violeta parpadeo
que desliza el deseo por encima
de la blusa, del juego, del proyecto.

Total, se trata de llegar a viejos sin dignidad.


Revolución Fantástica

martes, 27 de septiembre de 2011

De las muertes de mis muertes XIV

De las muertes de mis muertes
Inmóvil

Y voy sabiendo:
Que prefiero algunos pasos
que prefiero una banca fría
y una mirada de despedida
y que prefiero no desear nada.

No resistiendo a mis primitivos deseos
sino normalizándolos;
que me enternece ese suelo inmóvil
o ese rio que grita
inmóvil bajo la balsa que lo sigue.

Que eso que he visto derruido
ha sido parte de las ruinas de mis creencias,
se va convirtiendo en hogar de otras cosas
y que eso mismo forma parte de un paisaje más amplio
y que puede caer la torre, y el castillo.
Y el reino entero.
Y que eso fue sólo un mandato ridículo
porque todo lo que lo rodea ha estado ahí,
con sus cambios, con sus movimientos
e inmóvil.
Sinceramente inmóvil

Y lo voy sabiendo

Revolución Fantástica
Desliz sincero

sábado, 17 de septiembre de 2011

De las muertes de mis muertes XIII

De las muertes de mis muertes
Holístico


¡Oh solemnidad!

que caes de panza
que respiras polvo
en simplicidad

¡Oh responsabilidad!
que agitas tus puños
en verdes cauces
de ríos enmohecidos

¡Oh deber!,
¡Oh grandeza!,
¡Oh verdad!
en mí, al mirar atrás
van despertando
esa pizca de nada

¡Oh instante!,
me sigues sorprendiendo
a cada instante
y me acurruco

en ese ambiguo significado.
Dejándonos vagar.
Dejando vagar.


Revolución Fantástica
Desliz sincero

lunes, 29 de agosto de 2011

No sé

Juro, por todos los cielos, que de escribir sé muy poco, que de ideas tengo una parcela que parece maceta, qué me defiendo sin quererlo a partir de lo mismo que escribo siempre. Que sigo esperando ver levantado lo que ya está bastante destruido, y que ese pequeño suspiro que se cuela por la comisura de mis ojos queda empañado sin ser limpiado.
Y que cada vez que despierto me limpio la lagaña y no sé qué queda por hacer. Tenía un nudo en el pensamiento, ese nudo que me distraía, como siempre, justo como yo dije para no jugar en las cuerdas recicladas.
Y de sinceridades se arruga la frente y pesa el aire y sólo quiero escuchar a Pescetti.

martes, 2 de agosto de 2011

La importancia de ser un animal

La importancia de ser un animal

A las malas traducciones
de los nombres de películas
por saber educarme


En una pecera de mundos olvidados
Las tortugas le hacen de padres
Los payasos de compañía
y el mar de sepultero.

El ritmo del constante aprendizaje
Las acciones mecánicas
Permiten
De sol a sol
Poder vivir lo cotidiano.

Y cuando el dolor se convierte en cenizas
y el caparazón palabras de silencio
Las lágrimas brotan desde las sonrisas.


Anormalidad Incómoda
Revolución Fantástica

miércoles, 27 de julio de 2011

De las muertes de mis muertes XII

De las muertes de mis muertes
Máscara

Mi careta
Mi persona
Mi rostro

Inescrutable
Transparente
Endurecido

Con mis límites, bajos mis gestos
Sin sonido
Sin movimiento

Propio

Bajo sonrisas falsas
Y atenciones sobre la mesa
Sueños que se olvidan
Recuerdos que se otorgan

Que se regalan:
A unos pocos,
A unos cuantos
Dándose o para nada cuenta

Resumen de historias verdaderas
Narraciones de selecciones

Ese rostro me obedece
Cuando creo que me obedece
aunque de hecho
soy yo el que lo hace.


Anormalidad Incómoda
Revolución Fantástica

domingo, 3 de julio de 2011

Grafito y migajón

Grafito y migajón



Desde esa vez no lo olvidaría nunca. Ahora estaba completamente seguro de su significado.

La tercera vez que sucedió pasó desapercibido, ahora mismo no sé cuantas veces ha ocurrido exactamente lo mismo; sin embargo he logrado aislar algunas de esas ocasiones para reconstruir lo perdido.


Escribo cuentos, historias y fábulas, escribo textos como se van presentando, lo hago porque es el primer paso para irme corrigiendo, para crear historias que rescaten el recuerdo de un modo tangible y creíble. Lo hago del modo más adecuado, reflejándome a mí mismo, jugando con la hoja y con mi historia. Recreo mis recuerdos.


Llevo cierto tiempo haciéndolo, lo he anotado, 946 días desde que logré resolver el laberinto, desde que me di cuenta de la realidad de los mosaicos sobre los que me paro cada día y la falsedad de las palabras e ideas que me han alimentado durante esos años que se confunden con el escándalo de los pájaros en los parques, de eso que rellenó los huecos de mi memoria, brincando entre rostros y anécdotas que han aparecido a lo largo de mi vida.


Desde que murió mi hijo mi memoria me ha jugado chueco, ha decidido olvidar todo lo que juntos construimos. Fue mi primer y único hijo. El olvido se presentó alejando a su madre de mis recuerdos, eliminando mi casa y mis amigos, difuminando entre líneas irreales formas que estaban llenas de contenido. Me movía entre nubes densas que me impedían ver hechos claros, hechos que me ocurrían; vagué en un desierto de imaginación. Y entre esas fronteras difuminadas, esas que no lograban hacer distinguir a las cosas unas de otras, apreté mi mano cargada de confianza contra las ilusiones que me configuraban.


Cada momento me iba perdiendo más en mi mente, me encerraba junto a mis construcciones, me mantenía aislado, vedado al mundo externo. Ahora sé que lo exterior actuó sobre mí mientras yo construía escenarios para complementarme. Encerrado en un cuarto era alimentado y entrevistado. Sé que pasé por momentos similares de contacto con el mundo porque uno de esos logró despertarme. Muchos no se relacionaron con los gritos por la mañana de mi madre-realidad, fueron situaciones-realidad que interrumpían mi sueño apenas lo necesario para volver a dormir.


Cada que escribo lo hago con el único instrumento que me mantiene en la realidad, lo he hecho completamente mío, lo mantengo con un significado que me permite acceder al rostro de mi hijo, a su sonido, a sus palabras. Lo uso para crear mis historias, mis cuentos, lo hago porque es algo que me permite borrar lo que he construido, modificarlo y seguir construyendo. Como he hecho conmigo.


Me despertó: Una vez como sonido sobre la hoja de cualquier informe que debía ser llenado con mi entrevista, otro como un objeto retirado para evitar que me hiciera daño, una vez más asomando en la bolsa de la camisa de algún familiar que vino a verme, de nuevo en otra ocasión sólo siendo nombrado. Y esa vez con la apariencia de palabra “examen” que ha hecho que no pueda olvidarlo.

Un día antes de su muerte mi hijo de nueve años me dijo que tenía un examen y que necesitaba un lápiz para poder borrar si se equivocaba.
Anormalidad Incómoda
Revolución Fantástica

Gusanos del pantano

Gusanos del pantano

A Santa Fe por mostrármelo

a pesar de no ser las torres de satélite


Cuando se supo que las naves espaciales estaban llenas de invasores las armas fueron la única opción en la que se confió, el desarrollo armamentístico era tan elevado que jamás se imaginó que unas formas de vida más evolucionadas pudieran repeler de un modo tan sencillo los ataques.


La capacidad de los guerreros interestelares para controlar el estado de su materia corporal produjo un malestar generalizado, la posibilidad de esos seres de reconstruirse y viajar como partículas excitadas de un modo organizado destruía la fe de los estrategas más capacitados.

Cinco monjes que había estudiado durante toda su vida el arte de la meditación y las artes marciales a través de la energía salieron de su templo y, escalando las cadenas que lo suspendían en el abismo, emprendieron el viaje. Así, con los ojos cerrados y desnudos, llegaron al pantano.


Las naves se colgaban de los paisajes que alimentaban el recorrido de los monjes. Succionaban las aguas de los ríos, perforaban la tierra y extraían plantas y animales. Todo ser que puso resistencia a los invasores fue desintegrado desde adentro.


Al llegar los monjes el pantano respiró y les ofreció un terreno fangoso con olores putrefactos; cada uno pisó el terreno y comenzó a sumergirse.


El planeta rechazó a los invasores, en su núcleo los cinco monjes se encontraban meditando y combatiendo la perpetración de los extraterrestres.


Con movimientos que se leían como una danza lenta aglomeraban la energía necesaria para evitar el acercamiento de los otros. Las naves fueron empujadas hacia el espacio.


Los cinco monjes se fundieron en el núcleo de la tierra desde donde comenzaron a trabajar para su reconstrucción como los viejos textos lo indicaban.

Disculpas Ausentes

Revolución Fantástica

miércoles, 22 de junio de 2011

De las muertes de mis muertes XI

De las muertes de mis muertes
Asco

Eso
Sólido dudoso
Indescriptiblemente fétido
Abierto hasta el total descubierto
Impúdico, sucio, tormentoso.

Eso
Inolvidable.

Rechazo inmediato;
Mareos, arcadas.
Reacción instintiva.

Lo obsceno,
Lo detestable
lo grotesco.
Eso

Eso impronunciable
a lo que sólo los más osados
(Los buscadores de la verdad)
pueden acercarse y modificarlo.

Eso
que es tan delicioso como objeto de observación
eso
que se fija en la memoria,
identificándolo de inmediato.
Eso
se presenta constantemente
entre opiniones y formas individuales
en esa normalidad que se cree dada.

Esa objetividad que
por más comprensible,
por más distanciada
no deja de ser
Eso.

Anormalidad Incómoda
Revolución Fantástica

sábado, 18 de junio de 2011

¿Y si llevamos papelitos? - ¬¬* ¡NO!

¿Y si llevamos papelitos? - ¬¬* ¡NO!


Comedor, las sillas, el cigarro. La charla: Dos chicas, extranjeras, dos anfitriones, impacientes. Conquista mirada. ¿Un café?, un camino, la cocina, preparar la bebida, afuera, sorpresa, una idea, una manera de poner más divertida la plática. Regresando de la cocina, una taza en cada mano, una pregunta de desconcierto, una cara que responde sabiéndose culpable; ¿Y las chicas?. Se fueron a un hotel sabes, eso de traer papelitos y lanzarlos con ligas no funcionó como yo creía. En su país, creo, eso quiere decir que no te gustan y que huelen a podrido.


Disculpas Ausentes

Anormalidad Incómoda

Revolución Fantástica

viernes, 17 de junio de 2011

Café

Café

a John Irving con su Garp por darme la idea de escribir

para imitar lo que leo; y el desastre que esto genera:

no se trata únicamente de complicar el ponerse los zapatos.

-Vale; gracias. Contestó desde el rincón.

Cabía perfectamente en ese pedazo, con su pie logró crear un sendero corto e imaginario para ocupar su, ahora, lugar en el piso entre otras dos masas de frases triviales; de palabras diluidas.

Nos dirigimos a reuniones envueltos en ideas, nos encaminamos al acercamiento, al gran espíritu desde un encontronazo de sonoros beats que redondean, como movimiento que erosiona las piedras de un río, nuestras reflexiones cotidianas a una rutina funcional que se soporta con cualquier ritual que inventemos para darle complejidad a lo normalizado.

En realidad no busco tener “un modo” de ganarme la vida, a ver qué pasa, mira yo busco en realidad aprender a hacer algo que funcione bien, digo, algo que no siga siendo enajenado, que busque una posibilidad real que apoye a: “La gran transformación” que quiere la izquierda, pero sabes la izquierda de verdad no esa mamada de partidos, vaya no necesariamente que la calificación de un trabajo diga que tan capaz soy para hacer las cosas, las clases suelen ser una pendejada o bueno no, pero sí sé que es algo por donde yo no quiero ir.

Dos chicas lo miraban; seguro no te saldría nada bien, tanto “tirar verbo” ya estaba rayando en una estupidez que demostraría tus únicos tres sentidos que funcionaban, esa remolacha de conocimiento que rallaba en la ensalada una pizca de sabor distinto dentro de las pláticas “populares”, y la situación caería por su propio peso, ultimamente no te ha ido tan bien con las mujeres.

Y nos reunimos buscando un momento de dispersión: de posibilidades ya no diferentes. De ir a una reunión, sin esperar nada, sin buscarlo, simplemente yendo, en una continuidad de lo que de hecho sucede. Simplemente yendo.

Tomó la taza desde la izquierda, le dio un sorbo al café, escupió dentro de la taza y lo pasó a quienquiera que se encontrara en la derecha.

Jajajaja, pero sólo lo dije por decirlo, le neta ya quiero terminar, al fin y al cabo ya es hora de crecer, y bueno, ya me debo de dejar de pendejadas porque tienes que enfrentarte a ese crecimiento que evitas, pero tratas de hacerlo bien, suelo creerme ese rollo de que después se viene un golpe pesado que te re-modifica, una crisis que carga la edad y las responsabilidades, de esas que te esconden en su refrigerador por un rato, jajaja donde aparecen los primeros síntomas de la frigidez o de esos que te dicen que ya no te puedes meter con una morra, sabes. De las feas pues. Y uff tengo que hacer las cosas me gusten o no, pero trato de irme resistiendo para que en ese vaivén no me agarren sonso; al final importa mucho la resistencia.- le susurró.

Sonaba y no estaba enterado, la reunión tenía una patética ópera de Verdi. Una voz del fondo mencionó algo coherente con la supuesta reunión que no debía ser ñoña, y el clásico huapachoso que desea “una salsa pa'bailar”- nos reunimos entonces para conseguir algo más, algo más...
Me sentía a gusto con estos carnales.

Vaya la respuesta a lo último está resuelto, es evidente en el propio relato.

Tomó la taza desde la izquierda, le dió un sorbo al café, escupió dentro de la taza y lo pasó a quienquiera que se encontrara en la derecha.

Bueno resuelto, lo interesante ahora eran los rituales, si de todos modos nos movemos así y también de otros modos, entonces ¿qué pedo con esa invención de los rituales?

Platicas, resurrecciones de sentidos, recuerdos de momentos, silencios, divagues, reconstrucción y recuerdo, líneas que se unen con las nuestras, confianza pura. Vamos a reunirnos porque incluso dentro de una negación termina siendo reunión y nada más tan simple y llano, aunque no queramos, queremos. Y decidimos... aunque no necesariamente, no sólo así.

Estúpidos tres sentidos funcionales, preferiría perder el gusto antes que la capacidad para mantener una plática coherente. Pensar en voz alta mientras orinaba solía localizarlo en la imagen que a continuación vería en el espejo. En el lavabo, sin agua en el grifo, y con dos gotas de orina que secas olerían si acercaba la mano a su boca (finalmente embarradas en el pantalón de dos días) miraría su imagen reflejada y se daría ánimos para que “ojalá pase algo” y saldría a encontrarse con su recién posible conquista.

Disculpa tenía que saludar a esos cuates y me invitaron un sorbo, así que ya sabes me esperé a que diera la vuelta y les conté como iba en la escuela, son cuates chidos de la uni.

Ahhhhhhh, sólo poder gritar, somos una diminuta temporalidad de nosotros mismos que se redirigé constantemente a nuestra determinación por cosas que nos han ido creando. Realmente está muy intenso, somos como un filete de lo que sucede y no sabemos más que eso, no sé aún lo que es salir de la universidad y hablo desde donde estoy, da miedo crecer, pero al final habrá que hacerlo y me parece chido saber que ahí voy y está agradable, seimpre en construcción.

Amanecer en casa de alguien, viajes largos por la noche, reuniones que se convierten en enormes francachelas, (siempre una historia diferente, siempre la misma historia, ir y volver a casa lo más coherentemente posible, aún no vives solo), llegar y encontrar gente en la casa, te ofrecen café, se te antoja un sorbo.

Tomó la taza desde la izquierda, le dio un sorbo al café, escupió dentro de la taza y lo regresó a ese despierto en casa.

Disculpas Ausentes

Anormalidad Incómoda

Revolución Fantástica

De las muertes de mis muertes X

De las muertes de mis muertes
Importancia

"Yo" recitaba el poeta
"Yo" mascaba el avaro
"Yo" repetía el tirano
"Yo" argumentaba el académico.

Se escuchaba el "Yo"
Porque se sabía con palabras
Se sentía el "Yo"
Porque lo creían muy importante.

Demasiado importante.

Y entonces él, y tú y yo, y nosotros
y ustedes y ellos
y todos
todos, todos,
nos reunimos en nosotros
en ese nosotros tan importante

Nos reunimos juntos, y escuchamos "Él"
Y vimos "Ustedes"
e incluso entre murmullos se presentó "Nadie"
Todos, sin importancia, en conjunto
Todos importantes, muy importantes.

Y terminó la noche y el nosotros se separó
En ellos, en tú y en yo
En cada uno.

Y recordamos,
No demasiado,
No de modo rudo
No desconociendo.
Recordamos lo no importante
Y yo lo recordé, como todos.
Y yo dije:

Es tan agradable que no recite el poeta
que no mueva esas quijadas el avaro
que no se instale el tirano
que no construya el académico.

Y se lo dije al eco.
Y mi entorno me escuchó
Y me sentí importante
...
poco menos que un instante
y el entorno continuó,
y eso importante no lo fue
fue un estornudo del saber
una tos seca de lo que se genera

Y entonces escuché
y supe que me había equivocado,
Y que estaba en lo correcto.

"Yo" no es yo, sino todos,
cada uno, pero todos.

Me impacté y corrió el tiempo
Más que un instante
y me di cuenta de que eso
Tan grande y tan complejo
Era, para nada, importante.

Anormalidad Incómoda
Revolución Fantástica

domingo, 12 de junio de 2011

De las muertes de mis muertes IX

De las muertes de mis muertes
Y llegaron tarde

Hoy no es mi cumpleaños,
Hoy no nací,
Hoy soy el tiempo hecho presente
en inolvidables sueños
Bajo la lupa de la nada,
de la distancia

Respiro entrecortado
Devuelto al mundo del infierno
pedazos de cebo
Propuesta que se cumple en expediciones
consultas del tiempo

Repuestos inolvidables de resurrección
Intentos frustrados que comunican.
Deseos, propuestas, necesidades
Piezas de espasmos
Piruetas de demonios

Vivo el recuerdo del quehacer
me quedo desnutrido de los inventos de las teclas.
Y escribo nada,
Y todo
Permanentemente todo.

Y es incómodo,
y me burlo
y repito:
No, no, no. Resisto en burla,
hoy no es mi cumpleaños.

Anormalidad Incómoda
Revolución Fantástica

domingo, 5 de junio de 2011

Saltar (y suspenderse en el aire)

Saltar (y suspenderse en el aire)

A las cenizas y al polvo de un 4 de octubre del 70


Desgarrado
Con gritos desgarrados
Brutalmente desgarrado
Hermosamente desgarrado
Ahogado en el grito desgarrado
Desnudo ante las flores de tu encanto
Es ese desgarre el que me lleva al silbido del grito
..............................................................................................Al punto suspensivo
Que me abandona en los extremos del mundo
De las letras que se acomodan ahora
De las palabras que desbordan
De los oídos inclementes
Ante respiraciones
Ante velocidades
Acompañado

Anormalidad Incómoda
Revolución Fantástica

miércoles, 25 de mayo de 2011

Olas

Olas

A Pachelbel por inspirar a idiotas
Y no es únicamente silencio;
Sino aprender a estar en él,
contemplando el vacio del escándalo,
la sombra de nuestros ruidos,
el habla eterna y directa
es entender que hay cosas que no son de otro modo,
y que esas mismas, al percibirlas
y al acercarnos, las transformamos.
Es un rato de dolor que nos golpea
como roca erosionable,
como nube seca
como escupitajos de arena,
Caparazones mullidos que sirven de recuerdo.
Envueltos en el "nomás tantito" de ese eterno,
Nos rodamos, nos arrastramos y nos vamos transformando.

Anormalidad incómoda
Revolución Fantástica

jueves, 19 de mayo de 2011

Abrigo blanco

Abrigo blanco
A las falsas enseñanzas familiares

Cuerdas cuerdas cuerdas,

Quiero revestir mi mar de llanto
entre lágrimas
entre párpados.
Desatando, removiendo.
Dos palabras; el silencio.
Detente, detente,
No: es resisito

Anormalidad Incómoda
Revolución Fantástica

viernes, 29 de abril de 2011

Uni-verso desħecho

Uni-verso desħecho

A los que muestran el eclipse y logran describirlo

Hoy respiro años pasados

Entre ladridos y guitarras.
No de Padres cargando a hijos
sino de cerdos dejando de ser cerdos
y de sus perros, aterrorizando,
de sus perros correteando.
De los bloques hechos nombres.
De igualdades nunca iguales.
De esos cerdos que quisieron ser hombres.
Hoy escucho Perros
y se va manifestando,
como hormigas,
.....................................
fila de hormigas,
otro de mis dragones.


Anormalidad Incómoda
Revolución Fantástica

viernes, 1 de abril de 2011

Peregrinos

Peregrinos
A Herzog por cabrón

Te detenías soportando. Cómo ocultar la presión en mi piel cuando, con mis dedos entrelazados a los tuyos, me soportabas con el dolor y el sufrimiento corriendo por las gotas de sangre que chorreaban de mis heridas, cuando las fuerzas que me corroían arrojaban a la percepción de la gente dudas atestadas de respeto y reflexión, contraponiendo mi cara concentrada ante sus caras: habitantes del abismo.
¿Podría ocultar mi historia después del trayecto que me ha destrozado la carne lentamente?, ¿Puedo acaso ignorar la determinación con la que empecé, no ya este último trecho, sino allá en un lejano comienzo, cuando me calzaba o me dejaba descansar para hacer lo que sabía que tenía que hacer?
Porque aún forjado al rojo vivo, golpeado en yunque, modelado por mano dura de herrero, de artesano bárbaro; derramo lágrimas en silencio, ocultas tras mis ojos, las tiro mientras voy cargando mis fantasmas, ahuyentándolos, dejándolos a cada paso un poco más lejos, esperando, esperándome para que cuando tenga que volver se me adhieran en el camino que recorra luego de que todo esto haya acabado.
Termino y deposito todo, incluso ese soporte que me regalaron tus dedos entrelazados a lo míos, tus pasos diminutos para continuar a mi ritmo.
Me encuentro solo, despertando solo, descubriendo solo, lentamente, que no estoy solo, que mi camino no es sólo mi camino, que cada parte de esa muchedumbre que se levanta ante mis ojos traen una historia que no pueden dejar atrás, que se sujeta a sus hombros con cada instante nuevo.
La muchedumbre, todos, llevan a sus muertos, comparten a sus muertos; lo hacen porque empezaron a andar con ellos, ofreciéndo sus manos y sus dedos para soportarlos, negándose el aceptar que son ellos los que, como vivos, necesitan de la presión de la piel del otro, ya sean vivos o ya sean sus muertos.
La mirada se desliza del punto fijo, quieto, al punto alto, grande, esperado, que te invita movimiento. Del enfoque al horizonte.
Y regreso, de nuevo, a hacer lo mismo de siempre, diferente: Cubierto en el silencio, radicando en el desconocimiento, oculto en el sufrimiento, me construyo y sigo siendo.

Revolución Fantástica

viernes, 21 de enero de 2011

De las muertes de mis muertes VIII

De las muertes de mis muertes
Escribir
Recojo letras del piso
como colillas de cigarro,
compro palabras,
como si fueran putas.

Ahorro sílabas,
debajo del colchón;
Las escondo,
No sé cuantas tengo.

Reciclo ideas,
Relleno oraciones,
Con faltas de sentido.
Evito escribir.
Para que nadie me lea.

Tirando frases,
Como semén de pene masturbado.
Jodiendo parrafos,
Con comas, y puntos.

No escribo,
Copio.
No cuento,
Escucho.

No escribo,
Esta complexión de verso
no rima,
se contradice.

Transmito,
Transmitiendo que no transmito.
Escribo,
Escribiendo que no escribo.

Y eso es porque lo hice.
Revolución Fantástica

sábado, 15 de enero de 2011

Sociedad

Sociedad

Sus labios se movían, predicaban ideas habladas, encontraban verdades para expresar lo que sentían que el cerebro quería expresar. Del otro lado de la voz las orejas se colgaban del sonido, concentraban su enfoque a lo que de la boca se desprendía, los demás rumores del entorno resplandecían sin intensidad distrayendo levemente la imagen auditiva en el espacio.

A medida que se iba conformando el sentido del ruido producido, la contraparte construía opciones inmediatas,
cada instante iba siendo interpretado a partir del pasado inmediato y de la historia compartida. Mientras se iba construyendo la charla, la persona que escuchaba iba juzgando lo que se le enunciaba y le alegaba mentalmente, a partir del contexto de ese momento y a partir de lo que había vivido con la otra persona.

La pronunciación no sólo era producida por la garganta, estaba sumergida en gesticulaciones y malabares con el cuerpo, movimientos de sus facciones, parloteo de manos, codos y uñas, contracciones del esternón, inflamaciones del pecho y viento meciendo su cabello.

Mientras el discurso se iba extendiendo la mente de la otra persona iba conformando diálogos posibles, cada ciertas letras podía conducir la articulación del mensaje a una discusión que haría perder el hilo de lo que se estaba construyendo.
La imaginación se llenó de imágenes que relataban diversos paisajes plausibles, réplicas inmediatas a posturas externadas en el suave movimiento de la lengua de la primera persona.

Decidió no rebatir, no emitir alguna onda sonora más que la producida por su respiración, permitiría continuar la historia. En ciertos momentos los reclamos se estancaban en su tráquea, a ratos las carcajadas herían su estómago como si hubiera recibido numerosas puñaladas. Las oraciones que transitaban su cabeza eran llagas abiertas que laceraban sus encías. No construiría una encrucijada en la vereda que estaba siendo transitada por el carruaje que llevaba la narración.

Las correcciones del cuento no se formulaban. Al declararse mudo se otorga la razón plena al que verborrea.

El monólogo continuaba, una batalla entre el famoso juglar cantando su más versada oda contra el atento impertérrito a cualquier sinfonía producida por exclamaciones expulsadas al aire.

El soliloquio se ofuscó, el carruaje parecía aplastado por una ciudad edificada en milésimas de segundo, cada frase se hundía en aguas pantanosas repletas de caimanes. Carecía de sentido.
Su dicción encerraba a las mariposas del abecedario en una pecera de cristal, el barco encallaba en un banco de arena. Sólo quedaba el escándalo de la expectativa.

Demasiada ira acumulada, estaba absorta de necesidad de algún tipo de objeción; expulsar tantas cosas desde lo interno para que
coincidieran con lo que el lenguaje aceptaba como real no era sencillo, y la falta de reacción ante las dudas que habían resultado de la redacción de pensamientos, ante las negativas y cuestionamientos, ante el copioso vacío de la corroboración de hipótesis, de la ausencia de estimular la continuidad.

Se sentía desfallecer,
el golpe al sentido era brutal.

El miedo a estar en ese momento compartiendo algo que probablemente lastimaría a la otra persona, el temor al cálculo no hecho, a una programación fuera de la intención. Los ojos en menos de un instante
dieron a conocer realmente la información correcta, diciendo sin palabras ni conceptos lo que en todo el rato se estaba ocultando.

Le respondió con la mirada. Respondió que había
entendido.

La
comunicación estaba completa, se necesitaba continuar con la fachada intempestiva. -¿Qué opinas?- dijo con desesperación, ansiando oír al que había sido su espectador.

Tras una pausa contestó el
silencio.
Revolución Fantástica

“El sistema sociedad no se caracteriza entonces por una determinada ‘esencia’ (Wesen), ni mucho menos por una determinada moral (propagación de la felicidad, solidaridad, nivelación de condiciones de vida, integración por consenso racional, etcétera), sino únicamente por la operación que produce y re-produce a la sociedad: eso es la comunicación. Luego, por comunicación se entiende (así como por operación) un acontecimiento que en todo caso sucede de manera histórico-concreta, un acontecimiento que depende por tanto de contextos —no se trata, pues, únicamente de aplicación de reglas del hablar correcto. Para que la comunicación se efectúe es fundamental que todos los participantes intervengan con un saber y con un no-saber.
[…]
Como
praxis del sentido, la comunicación también se ve obligada a hacer distinciones para señalar uno de los lados y proveerlo con enlaces.
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Cuando se entiende a la comunicación como una unidad compuesta por tres componentes producidos por la misma comunicación
(información/ darla-a-conocer/entenderla), se excluye la posibilidad de adjudicarle a uno de ellos un primado ontológico. No puede partirse de que primero se da un mundo objetivo sobre el cual después se habla. Tampoco, el origen de la comunicación se encuentra en la acción ‘subjetiva’ —proveedora de sentido— del darla a conocer. Ni existe tampoco de antemano una sociedad que prescribe a través de sus instituciones culturales lo que debe entenderse por comunicación. La unidad de los acontecimientos comunicativos no puede derivarse ni objetiva ni subjetiva ni socialmente. Justo por eso la comunicación se crea para sí el médium del sentido en donde incesantemente se establece si la comunicación siguiente busca su problema en la información o en el acto de darla-a-conocer o en el entenderla. Los componentes de la comunicación se presuponen mutuamente: están enlazados de manera circular. No pueden fijar sus externalizaciones en modo ontológico como si fueran atributos del mundo; cada vez las tienen que buscar en el paso de una comunicación a otra.”
(Niklas
Luhmann, La sociedad
de la sociedad)